Una vez me preguntó un amigo ateo ¿Si Dios sabía que satanás le iba a fallar porque lo creó? Ésta pregunta me dejó perplejo, pues hasta ese momento no sabía que era ateo; y por la complejidad de la pregunta.
Me quedé pensando por unos segundos para esperar que me revelaba el Espíritu Santo, porque hasta ese momento no había meditado en ése asunto, ni nadie me había hecho esa pregunta. La palabra de Dios nos dice que cuando alguien nos demande razón del Evangelio que predicamos, el Espíritu Santo nos recordará lo que habremos de decir.
He aquí lo que el Espíritu Santo me enseñó ese día: El Altísimo creó a Satanás aún sabiendo que le iba a fallar, porque Él no puede negarse a si mismo. Si él concibió en su mente crear ése ángel aún sabiendo que le iba a fallar y debido a ésto le negaba el derecho de existencia, entonces el Creador se constituía en un tirano que solo fabrica robots que estan programados para adorarle de manera automática.
Contrario a ésto en el Eterno reposa toda la bondad y misericordia y no podía negarse a si mismo para evitar que éste ángel, que en principio era la criatura más luminosa del universo, recibiera la oportunidad de libre escogencia de a quien servir y adorar. Al igual que éste ángel, los demás ángeles recibieron éste derecho también. La misma situación sucede con Judas Iscariote. El Altísimo sabiendo que iba a entregar al Salvador, no le negó el derecho de nacer, crecer y más allá le permitió estar al lado de Jesús y ser administrador de los fondos que recaudaban, dándole la oportunidad de arrepentimiento, pero desgraciadamente éste escogió entregar al Maestro que seguir sirviéndole. De igual manera pasa con nosotros. Jehová nos forma, nacemos, crecemos y morimos con la libertad de escoger a quién servir, si a los ídolos o al único y sabio Dios. Al Rey supremo e inmortal al cuál sea toda la gloria y el imperio sempiterno.
Luego pasó el tiempo y el Espíritu Santo me enseñó que plan diseñó Jehová cómo su obra cumbre para contrarrestar la rebeldía de éste ángel que luego más tarde de rebelaria en contra de su Creador.
La biblia dice en Efesios 1:9,10 qué Dios que hace las cosas según el puro afecto de su voluntad, se propuso en si mismo de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, tanto las están en la tierra, como las que están en el cielo.
Honro y glorifico al Eterno por darme ésta enseñanza.
La Paz de Dios sea contigo.
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